1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Un millón para el mejor profesor

Gaby Reucher (JAG/ PK)9 de diciembre de 2014

Conocido como el Nobel de los docentes, el Global Teacher Prize distingue a profesores especialmente comprometidos. Entre los 50 elegidos, también hay una candidata alemana.

https://p.dw.com/p/1E1fs
Imagen: privat

En muchos países, la imagen de los profesores no es demasiado buena. En los más pobres, los docentes están muchas veces mal formados y mal pagados. Por el contrario, en Alemania las exigencias son tan grandes que los profesores casi no alcanzan a cumplirlas. No solo basta con transmitir el conocimiento, sino también tienen ocuparse de la integración multicultural, de niños con problemas y de preparar a los más mayores para su vida profesional. “Si queremos hacerlo bien, en seguida nos vemos superados”, aclara Mareike Hachemer, profesora de escuela profesional.

Pese a esta afirmación, esta profesora alemana parece saber cumplir con su labor y, sobre todo, cómo hacerlo todo bien. Su nombre aparece en la lista de los 50 elegidos para el Global Teacher Prize. Aparte de destacar por su alta dotación económica de un millón de dólares, este premio busca mejorar la imagen de de los profesores y mostrar su mejor cara, explica Sunny Varkey, fundador de la Varkey GEMS Foundation, organizadora del certamen. Sobre todo, las caras de los profesores comprometidos que influyen positivamente en la vida de muchos jóvenes.

Sunny Varkey, de la Fundación Varkey GEMS
Sunny Varkey, de la Fundación Varkey GEMSImagen: Varkey GEMS Foundation

Un podio para el compromiso social

Mareike Hachemer descubrió el premio por casualidad después de haber sido propuesta por cuatro colegas. “Se buscaban candidatos con un buen método de enseñanza y buena respuesta de padres y alumnos”, aclara Hachemer. Además, para la fundación Varkey GEMS era también importante la preparación de los alumnos para un mundo globalizado. Sobre todo, abrirse a otras culturas evitando caer en el racismo.

“En nuestra escuela, el plan de inglés ofrece muchas posibilidades de tratar estos temas”, explica la profesora. Así pueden hablar de las condiciones de vida de las niñas de origen indio o paquistaní en Gran Bretaña y de cómo funciona la convivencia entre diferentes culturas. Aparte de los libros, la profesora cuenta con el apoyo de alumnos de distintas nacionalidades que contribuyen con información de primera mano sobre la forma de actuar ante los prejuicios. Además, a través de una disciplina de teatro educativo, inculca a sus alumnos valores de justicia social, otro de los criterios del jurado.

Un millón de reconocimiento

Para optar al premio, la pedagoga tuvo que someter a juicio del jurado todo su compromiso enviando numerosas pruebas y trabajos realizados en los últimos años. También tuvo que cumplir con todos los criterios y responder a muchas preguntas. Entre las más de 5.000 candidaturas de 127 países, solo 50 pasaron a la fase final y Mareike se siente honrada con esta nominación, que también sirve para que se reconozca su trabajo.

Aun así, la profesora no cree que vaya a ganar. Entre los 50 elegidos hay profesores de países pobres que luchan por necesidades muy básicas como el agua. En su opinión, estos últimos tienen mucho más mérito. Pero si recibe el galardón, ya tiene previsto en qué gastar el dinero, ya que esta fue otra de las preguntas que tuvo que responder: Viajar por todo el mundo y visitar escuelas, conocer otros conceptos de enseñanza y hacer teatro. Pero para eso, todavía tendrá que esperar hasta marzo cuando se dé a conocer el nombre del profesor afortunado.