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Reacciones internacionales a la Gran Coalición

Jeanette Seiffert / JAG28 de noviembre de 2013

Aprobado el pacto para formar Gobierno en Alemania, otros países de la región barajan posibles escenarios sobre sus efectos en política europea.

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Imagen: Reuters

Las bolsas europeas acogieron positivamente el acuerdo alcanzado en Alemania para formar Gobierno. El curso del euro subió y también el Eurostoxx50, con los valores más importantes de Europa, aumentó un 0,2%. Pero la causa no fue únicamente el contenido del pacto, sino el hecho de que SPD, CDU y CSU llegaron realmente a un acuerdo en puntos necesarios para gobernar juntos. Y eso es importante ya que importantes decisiones europeas están bloquedas hasta que se forme un nuevo Gobierno en Berlín.

Una de cal y otra de arena

Ahora, el documento está encima de la mesa con nada menos 185 páginas. Aunque a países como Grecia sólo le interesan algunas. Sobre todo las referidas a la crisis de deuda. De acuerdo con el pacto, los paquetes de ayuda a países endeudados sólo se aplicarán cuando estos cumplan las medidas de ahorro y reformas.

Para el Gobierno heleno es una decepción, opina Illias Katsoulis, politólogo de la universidad Panteion de Atenas. “Creo que esperaban que el SPD defendiese una política contra la austeridad en la coalición”. En el mismo sentido opina el ex ministro de Exteriores griego y actual eurodiputado Dimitrios Dorutsas, en entrevista con DW: “Angela Merkel y la Unión se han impuesto con su divisa: ahorro, ahorro, ahorro…”

Cuatro años de Gran Coalición. También para Europa.
Cuatro años de Gran Coalición. También para Europa.Imagen: picture-alliance/dpa

Para Katsoulis, será difícil además explicar a los griegos que Alemania haya aprobado un salario mínimo de 8,5 euros por hora y más renta para las mujeres. O que muchos alemanes puedan jubilarse con 63 años: “Los sueldos y las pensiones en Grecia han caído mucho. Nuestros ingresos han bajado entre un 50 y un 60%”, en parte por las políticas deAngela Merkel.

Sorprendido por las concesiones de la Unión Cristianodemócrata al SPD sobre el salario mínimo y la doble nacionalidad, el diario croata Vecernji List valora el pacto de una forma muy distinta: “Los conservadores han tirado por la borda casi todos sus principios”, estima el periódico.

Doble nacionalidad "light"

Precisamente la doble nacionalidad es uno de los puntos más controvertidos del acuerdo de coalición. Con la nueva regulación, niños nacidos en Alemania de padres extranjeros ya no tendrán que decidirse antes de los 23 años por uno de los dos pasaportes. Aunque tampoco significa que todos los inmigrantes tengan derecho a la noble nacionalidad.

Große Koalition CDU und SPD einigen sich 27. Nov. 2013 Koalitionsvertrag
Concesiones por ambas partes.Imagen: Reuters

Esta nueva regulación afecta sobre todo a jóvenes turco-alemanes. Para ellos sería un gran paso adelante, dice Emre Gönen, del Instituto Europeo de la Universidad Bilgi, de Estambul. Sin embargo, en Turquía no interesa tanto el asunto: “Angela Merkel sigue siendo canciller y esa es la noticia”, dice el sociólogo. Y no sólo en sentido positivo: “Los medios turcos saben que Angela Merkel no quiere que Turquía entre en la UE y por eso hay pocas esperanzas mientras siga siendo canciller”, indica. Aun así, expertos turcos confían en una mayor influencia del SPD: “Recuerdo que en la última Gran Coalición, la política alemana hacia Turquía fue mucho más flexible que en el siguiente Gobierno (cristianodemócrata - liberal). Quizás se pueda continuar ese camino”, aclara Gönen.

Entre socios y vecinos

La que sí debería alegrarse por el acuerdo es Rusia, ya que hay todo un capítulo dedicado a la cooperación económica y política entre Berlín, Bruselas y Moscú. Para Vladislav Below, del Instituto Europeo de la Academia de Ciencias Rusa, es una gran noticia que los socialdemócratas entren al Gobierno: “Tanto SPD como CDU/CSU son socios seguros para Rusia. Así lo mostró también la anterior Gran Coalición”.

Por el contrario, el acuerdo puede suponer una preocupación para la vecina Holanda. Sobre todo por los pasajes de la página 39, donde se regula la aplicación de un peaje para coches extranjeros en las autopistas alemanas a partir de 2014. “Si Berlín se atreve a ordeñar a sus vecinos europeos, es posible que en toda Europa se comience a aplicar peajes“, teme el diario holandés De Telegraaf, advirtiendo. “Las tarjetas de peaje serían un hachazo para las raíces de la Unión Europea”.