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El Mundial problemático

Daniel Martínez4 de octubre de 2013

Denuncias de “esclavitud” y violación de los derechos humanos de los trabajadores extranjeros empleados en las obras de infraestructura son las nuevas manchas que salpican el polémico Mundial de Fútbol Qatar 2022.

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Más que de fútbol, en torno al Mundial 2022 de Qatar se habla de violación de los derechos humanos.
Más que de fútbol, en torno al Mundial 2022 de Qatar se habla de violación de los derechos humanos.Imagen: picture alliance/Frank Rumpenhorst

Aunque faltan más de ocho años para que el balón ruede en Qatar, la Copa del Mundo de la que el emirato árabe será anfitrión ocupa a la prensa permanentemente, y no por cosas buenas. Las sospechas de corrupción en la asignación de la sede, las elevadas temperaturas bajo las cuales se jugarán los partidos de fútbol, y ahora las denuncias de las pésimas condiciones de trabajo a las que son sometidos los obreros que construyen la infraestructura del Mundial qatarí, hacen noticia diaria al lejano Mundial.

“El evento costará la vida a mínimo 4.000 personas”

El periódico inglés The Guardian informó que entre junio y agosto de este año han muerto por paros cardiacos, fatiga y accidentes en las obras para el Mundial, por lo menos 44 trabajadores oriundos de Nepal. De ese país viene la mayoría de los obreros empleados en el sector de la construcción en Qatar, donde se estima trabajan unos 500.000 extranjeros.

La muerte de estos obreros no es casualidad, según sostienen voceros de organizaciones de derechos humanos, que calculan que en los últimos dos años han fallecido más de 400 personas a consecuencia de las extremas condiciones en que cumplen su trabajo. “De seguir así las cosas, el evento le costará la vida a mínimo 4.000 personas”, sostiene la Confederación Sindical Internacional.

Las previsiones tienen en cuenta lo que las organizaciones consideran como un trato inhumano a los empleados extranjeros en Qatar, que muchos califican de “esclavitud moderna”. Los obreros, según los informes, trabajan sin pausa bajo temperaturas superiores a los 50 grados centígrados, no cuentan con un salario formal, son hospedados en alojamientos sobrepoblados sin la más mínima higiene. Además, hay denuncias sobre violaciones como privación de agua, y la confiscación de los pasaportes para evitar el regreso a sus países de origen.

Sin nada que temer

Qatar ha desmentido los reportes de prensa. Ali al-Marri, presidente del Comité Nacional de Derechos Humanos, afirmó: “Aquí no hay esclavitud ni trabajos forzados, la información de The Guardian es falsa y la cifra de víctimas exagerada”.

El gobierno del emirato árabe se ha lanzado a la ofensiva y ha encargado al gabinete internacional de abogados DLA Piper la labor de verificar las condiciones en las que los jornaleros trabajan en las obras para el Mundial de Fútbol 2022. Un comité de investigación iniciará el próximo lunes una visita a Qatar para establecer la veracidad de las denuncias sobre violación de los derechos humanos de los trabajadores extranjeros.

“Estamos absolutamente convencidos de que nadie nos va a quitar el Mundial, ese temor nunca lo hemos tenido porque sabemos que estamos haciendo todo de forma correcta” declaró el presidente del Comité Organizador de la Copa del Mundo 2022, Hassan Al Thawadi en Suiza durante las sesiones del comité ejecutivo de la FIFA.

Según las denuncias los obreros extranjeros trabajan sin pausa bajo un calor inclemente de hasta 50 grados.
Según las denuncias los obreros extranjeros trabajan sin pausa bajo un calor inclemente de hasta 50 grados.Imagen: picture-alliance/dpa

El calor es más importante

Pese a la petición del representante alemán en la FIFA, Theo Zwanziger, de la necesidad de que la comisión ética de la organización intervenga ante las denuncias contra Qatar, la rectora del fútbol internacional tiene otras prioridades en torno al Mundial 2022.

“No hay ninguna duda de que el Mundial se jugará en Qatar, la única duda es si el evento se realizará en invierno, y en qué mes: ¿noviembre, diciembre o enero?”, resumió el vocero de prensa de la FIFA, Walter de Gregorio, la posición de la organización.

Debido a las altas temperaturas bajo las cuales se jugarán los partidos en verano, Joseph Blatter, presidente de la FIFA, ha expresado preferir que el evento se posponga a los meses de noviembre y diciembre, en tanto el presidente de la organización del balompié europeo UEFA, Michel Platini, favorece enero y febrero. En el mundo del fútbol el trato a los obreros en Qatar no es un tema tan importante como las temperaturas en los estadios.