Putin califica de “tonto” eventual boicot contra Sochi
19 de enero de 2014
El presidente ruso, Vladimir Putin, calificó este domingo (19.01.2014) de “tonto” y anticuado el debate en el mundo occidental sobre un boicot a los Juegos Olímpicos de Sochi. En una entrevista con diferentes medios locales e internacionales, el jefe de Kremlin consideró que ese tipo de discusión representa un “resabio de un viejo pensamiento del pasado”, como en la Guerra Fría.
Putin argumentó que eventos deportivos como el de Sochi están para “despolitizar” problemas internacionales y construir puentes. “Es tonto no utilizar esta posibilidad. Y es aún más tonto quemar esos puentes”, añadió el jefe de estado en diálogo con la televisión estatal rusa y emisoras internacionales como la BBC y ABC News.
Los Juegos Olímpicos de Invierno, que se disputarán entre el 7 y el 23 de febrero en el balneario sobre el Mar Negro, han despertado críticas del mundo occidental por las restricciones a libertades fundamentales en el país. Numeroso políticos, entre ellos los presidentes de Alemania y Estados Unidos, Joachim Gauck y Barack Obama, así como organizaciones de derechos humanos, ya anunciaron que no estarán presentes durante la cita.
Los más caros de la historia
Putin enfatizó en la entrevista que nadie será discriminado en Rusia por su “orientación sexual”, su raza o su origen. Sin embargo, defendió la denominada “ley antigay” y argumentó que en Rusia no están prohibidas las relaciones homosexuales, sino su propaganda frente a menores.
El presidente ruso se refirió además a las fuertes medidas de seguridad que se implementarán tras los dos ataques terroristas que sacudieron la ciudad de Volgogrado en un plazo de 24 horas a fines de diciembre y acabaron con la vida de más de 30 personas.
“Vigilaremos el espacio aéreo, la región marítima y las regiones montañosas. Espero que sea organizado de una manera que no moleste demasiado”, explicó. Con una inversión total de unos 37.500 millones de euros (unos 50.000 millones de dólares), los Juegos de Sochi son considerados los más caros de la historia del olimpismo. (dpa)