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La lectura: ¿privilegio de unos pocos o pasión de multitudes?

Violeta Campos (recopilación)27 de diciembre de 2012

Los alemanes son apasionados por la lectura. En promedio, compran diez libros al año e invierten 41 euros per cápita en este ítem. Según nuestros usuarios, en Latinoamérica la lectura sigue siendo un privilegio.

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Imagen: Fotolia/Panoramo

Los alemanes están locos por los libros

El libro impreso es insustituible.

Cesar Alberto Mata Martínez, Facebook

El futuro es oscuro, ya que la tecnología ha reemplazado casi en su totalidad a la lectura, en jóvenes y niños, por lo menos, en Colombia.

Catalina Uribe M., Facebook

En México, lo que nos falta es cultura de lectura. Se han hecho ferias del libro, donde salen súper baratos, pero yo veo que no es suficiente la dedicación a la lectura.

Marcela Esther Aguirre, Facebook

En Chile se castiga a quien gusta leer, aplicando impuestos al libro. La lectura es la mejor manera de adquirir conocimientos, opinión propia, habilidades de comunicación. Fortalece la imaginación y es un importante ingrediente para acrecentar la inteligencia. Entrega sabiduría y nos muestra un mundo más complejo y dimensiones sociales, culturales, existenciales, filosóficas, estructurales diversas, más allá de las que podríamos llegar a conocer en una sola vida. Un pueblo lector no sirve a los propósitos políticos ni religiosos. Quien lee, se forma, quien se forma, conoce, quien conoce, difiere, quien difiere es un peligro para el establecimiento de este modelo social y económico que se nutre de personas no beligerantes; ciudadanos que no cuestionan, humanos que sólo obedecen lo que el mercado les impone.

Javier Del Río Richter, Facebook

En Alemania se lee mucho, entre otras cosas, porque no hay muchos niños, pues a éstos hay que dedicarles mucho tiempo y energía, por lo que queda poco tiempo para leer. Antes que aislarse por mucho tiempo con un libro, también es necesario hablar un poco en grupo o en familia.

¿El libro impreso se está quedando a la zaga?
¿El libro impreso se está quedando a la zaga?Imagen: AndreyPS - Fotolia.com

Eduardo Ferrer, Facebook

Soy lectora completamente. Tengo ese hábito desde hace muchos años. No pasa un día sin que deleite mi mirada con un libro. Amo los libros y amo cuidarlos como un tesoro.

Sefardí Celeste, Facebook

Yo me voy a la Ciudad de México a los "tianguis" o mercados de pulgas y librerías especializadas en libros de segunda mano, y me traigo a mi ciudad 30 o 40 libros baratísimos, a veces por menos de 100 €. En mi país, los libros no están gravados con impuestos, aunque la derecha ha intentado gravarlos, la izquierda siempre lo ha impedido. Desde mi punto de vista los libros son accesibles; es más cara una salida al cine que un buen libro. Y usados son muy baratos. El que no lee es por que no quiere.

Juan Carlos Ávila, Facebook

Yo prefiero los libros virtuales, así no tumban tantos árboles.

Carmen Libia Pérez García, Facebook

En Venezuela, los libros no pagan impuesto. Hay libertad de expresión y de todo.

María Antonieta Guevara Rengel, Facebook

El tiempo, ese espacio en extinción, es lo que se necesita para leer y disfrutar.

María Victoria Santamar, Facebook

Me encanta leer, pero lamentablemente en Chile, el impuesto al libro es vergonzosamente alto y eso hace que el costo para comprar un libro sea demasiado alto y desmotive a la ciudadanía a comprarlos y culturizarse. Priorizan en satisfacer sus necesidades básicas primero para poder vivir y comer.

Meylin Elisabeth Ubilla González, Facebook

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Autora: Violeta Campos (recopilación)

Editor: Pablo Kummetz