Críticas a política migratoria y al nuevo Gobierno alemán
12 de octubre de 2005
Die Süddeutsche Zeitung de Munich analiza: " Sería equivocado definir desde el principio a la gran coalición como una unión con falta de acción programada, como un Gobierno que poco podrá cambiar por que el mismo es su impedimento. Después de la repartición de gabinetes está claro que no habrá cambios radicales, como los cristianodemócratas (CDU) habían anunciado antes de las elecciones".
El diario La Repubblica de Roma informa: "Por un lado amenazan los diputados socialedemócratas (SPD) con no votar a favor de la futura Canciller, y por otro lado avisan los cristianodemócratas (CSU), de Baviera, que podrán hacer uso de poder limitadamente. La era Angela Merkel comienza mal. Un día después de la principal decisión de formar una gran coalición entre la CDU y SPD, la mujer que va a regir esta coalición descubre que está atrapada en campo enemigo y que debe luchar en dos frentes.
De acuerdo a las encuestas la mayoría de los alemanes parece estar escépticos (…) Existe también la horrible impresión, de que existe un fuego cruzado contra Merkel".
La valla entre el norte y el sur
El Daily Telegraph de Londres apunta: "La ultima oleada hacia el norte fue apoyada por la amnistía, que este año el gobierno de España le dio a 700.000 inmigrantes en este país. Esta decisión jurídica solucionó por un lado la irregularidad en la cual vivían miles de ilegales y por otro lado reconoció la necesidad de la creciente economía española de más mano de obra migratoria. Esta necesidad no se limita solamente a la península ibérica: la Unión Europea llegó el último año a la conclusión de que para la expansión de la UE, son necesarios grandes grupos de inmigrantes debido al decreciente porcentaje de la población laboral.
El problema está en que desde el aspecto cultural es difícil aceptar lo que la economía necesita. Es por eso que los políticos reconocen a medias la dependencia del crecimiento económico de sus países de los trabajadores extranjeros".
Ouest France de París comenta: "Una muralla entre el norte y el sur se construye ante nuestros ojos. Miles de personas intentan sobrepasar con escaleras y troncos los alambres de púas que separan Marruecos del enclave español. Once personas han muerto en diez días. Muchos de los que golpean a nuestras puertas tienen la esperanza de ganar suficiente dinero como para retornar con orgullo a sus países y allí poder iniciar un negocio. Este tipo de proyectos deben ser apoyados y facilitados. Los inmigrantes son también una fuente de trabajo para el país que lo recibe. Muchas industrias se apoyan en el trabajo de los inmigrantes, frecuentemente ilegales. Los ciudadanos de nuestros países deben recibir abiertamente a los inmigrantes. Pues se trata de crear un futuro en conjunto, donde la igualdad y el respeto al prójimo sean la fuente de dinámica y concordia".