1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Colapso de mina de carbón en Afganistán deja 28 muertos

15 de septiembre de 2013

Explosión de gas puso en evidencia las paupérrimas condiciones de seguridad con que laboran los mineros en ese país asiático. Hubo un centenar de heridos.

https://p.dw.com/p/19hyL
Los mineros quedaron atrapados en la provincia afgana de Samangan.
Los mineros quedaron atrapados en la provincia afgana de Samangan.Imagen: Qais Usyan/AFP/Getty Images

Una explosión de gas en una mina de carbón ubicada en la provincia de Samangan, en Afganistán, dejó un total de 28 muertos, de acuerdo a reportes entregados este domingo (15.09.2013) por las autoridades. El accidente ocurrió el sábado, y desde entonces los equipos de rescate han trabajado en el lugar en la búsqueda de sobrevivientes.

Sin embargo, este domingo el portavoz provincial, Mohamed Sedi Azizi, dijo a la agencia de noticias AFP que “24 cuerpos han sido recuperados y otros cuatro están todavía bajo los escombros, pero han sido declarados fallecidos”. De esta forma, se dio por terminada la búsqueda de personas vivas y ahora solamente queda recuperar los cadáveres restantes.

“Ya se están organizando las ceremonias funerarias de aquellos que perdieron la vida. Unos 100 trabajadores fueron llevados a distintos hospitales, aunque fueron enviados a sus casas tras recibir tratamiento”, dijo Azizi. Cuatro rescatistas resultaron gravemente heridos mientras intentaban salvar a los mineros atrapados en la tragedia, ocurrida al norte del país asiático.

Rico, pero sin inversiones

La mina colapsó aparentemente por una explosión masiva de gas. El presidente afgano, Hamid Karzai, entregó sus condolencias a las familias de las víctimas y ordenó una investigación al Ministerio de Minas. Al mismo tiempo, el Gobierno desmintió que la veta estuviera siendo explotada de forma ilegal, como insinuaron algunos medios, que afirmaron que en la región existen muchas minas que operan fuera del marco legal.

El Gobierno afgano intenta convencer a inversionistas extranjeros de las bondades naturales del país, especialmente rico en recursos como cobre y carbón. Hasta ahora, sobre todo China se ha implicado en la minería afgana. Los países occidentales están menos dispuestos a invertir, debido a la mala situación de seguridad en este país sacudido por un prolongado conflicto armado.

En las operaciones de ayuda a los heridos y atrapados participaron también cientos de residentes. Las condiciones de trabajo en Afganistán están en su peor momento, entre otras razones debido a la guerra. Quienes se aventuren en una mina con seguridad irán equipados con primitivas herramientas de protección y la ventilación de los diques es siempre escasa.

DZC (AFP, Europa Press, dpa)