Querella de Aerolíneas Argentinas contra empresario español

La Justicia española admitió la querella presentada por Aerolíneas Argentinas contra el empresario español Gerrardo Díaz Ferrán por la supuesta apropiación indebida de 453 millones de dólares(418 millones de euros) en el proceso de compra de la compañía por parte de la aerolínea Air Comet. El juez Fernando Andreu citó a declarar a Díaz Ferrán, expresidente de la patronal española CEOE, y al ex consejero delegado de Air Comet, Antonio Mata, tras admitir una querella de Aerolíneas Argentinas por blanqueo, malversación, apropiación indebida y falsedad documental.

Díaz Ferrán, Mata y Air Comet se habrían adueñado de dicha cantidad, que en 2001 entregó la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales española (SEPI) durante la venta a Air Comet de la sociedad propietaria de la práctica totalidad del capital de Aerolíneas Argentinas. Según el auto, Air Comet debía destinar ese dinero a la implantación del plan industrial de Aerolíneas Argentinas y a la satisfacción de contingencias. Sin embargo, Díaz Ferrán y Mata "hicieron suyas dichas cantidades" a través de una operación de compensación de deudas de Air Comet respecto a Aerolínas, apunta el auto. La operación se habría realizado a través de cuentas mercantiles que existían entre Air Comet y Aerolíneas Argentinas, ambas pertenecientes al Grupo Marsans, de Díaz Ferrán.

El empresario español ya fue condenado en diciembre de 2013 a dos años de cárcel por defraudar al fisco español 99 millones de euros (más de 130 millones de dólares) en la compra de Aerolíneas Argentinas. En la Navidad de 2009, Air Comet cerró por insolvencia y dejó en tierra a miles de pasajeros que pasaron la Nochebuena en el aeropuerto de Madrid-Barajas. La quiebra del Grupo Marsans, en su día uno de los más importantes del sector turístico en España, dejó en 2010 más de 4.700 afectados y una deuda acumulada de más de 400 millones de euros (550 millones de dólares). Díaz Ferrán fue declarado culpable hasta ahora de la quiebra de cuatro de sus empresas: Viajes Marsans y tres de sus filiales. El empresario de 72 años encuentra el prisión preventiva desde finales de 2010 por el vaciamiento de Viajes Marsans, por el que será juzgado (dpa).